24 de julio de 2008

Salus per aquam

Quizá algunos de ustedes hayan disfrutado de las bondades de esos establecimientos que ofertan ocio y salud en un mismo paquete, llámese balneario o spá. No es mi caso. Los lugares tranquilos que invitan al sosiego me producen estrés. Pero he encontrado un lugar que, conjuga mi psicología inversa con los beneficios del agua y mi afición por la historia.

Ayer tarde visitamos los baños de La Hedionda, en Casares. Son de origen romano y la leyenda que da lugar a su creación nombra al mismo Julio César. Al parecer, las legiones romanas que iban a enfrentarse a las tropas de Pompeyo acamparon por el lugar y probaron de los efectos curativos de sus aguas. Fue el mismo emperador el que mandó construir los baños de los que hoy disfrutamos. En excavaciones de los años 90, se descubrieron y estudiaron con más detenimiento la ampliación acometida por los árabes tanto del recinto como de las nuevas canalizaciones, posiblemente realizadas debido a un cambio en el caudal del arroyo de aguas sulfurosas de las que se surte la fuente.
La "oferta" de este spa-histórico no se limita al baño en las aguas sulfurosas. Foma parte del ritual de la visita, embadurnarse de la arcilla que puede obtener en el río y dejarla secar hasta que se cuartee. Con posterioridad, otro baño desprenderá el lodo de la piel.

No he hablado del olor que desprende la zona por la presencia de sulfuro y hierro en sus aguas pero la sensación de hacer uso de un edificio romano en su función original es tan gratificante que supera la repugnancia que en principio pudiera tener.

9 comentarios:

Más claro, agua dijo...

Se ve que no puedes separar trabajo y placer, ¿eh? :-)

Lo de "La Hedionda" entiendo que será por ese olor que mencionas, ¿no? Es el problema que tenían los romanos: que todavía no se había inventado el Devorolor ni el pino ese que se cuelga del retrovisor del coche :-)

Breuil dijo...

Sr. Cruz, una que es un poco masoquista. Eso y que disfrutar del tiempo libre sin hacer nada no va conmigo. ¡Ya me gustaría! :)
Y sí, el nombre describe el ambiente del lugar, pero es soportable ¿eh?
Saludos sulfatados.

Anónimo dijo...

la primera vez que me llevasteis alli no podia soportar el olor!
pero por lo menos pasamos una tarde divertida!^^
besitos!!

P.D.:que tal lo estais pasando?

=)

Breuil dijo...

Hola Candela... mañana te mando a Marina para allá. Hoy hemos ido a la playa de los Lances (Tarifa) y nos ha tocado ponientito revoltoso; así que al rato nos volvimos.
Lo del olor... ¡es que sois muy tiquismiquis! ¡El olor a huevo podrido no es tan desagradable...! jajajajajja
:P

Uno dijo...

A mi me ocurre igual con todas esas cosas de quietud y relajación me producen agobio e inquietud.

Nombre preciso, por lo que cuentas, el de "La Hedionda". No sé si yo lo soportaría. No creo que no. A demás macharse con barros... no, definitivamente no. Pero me encanta que tú lo disfrutes, eso sí, ya podrías haber puesto una foto tuya toda "embarrá".

Saludos

bornne dijo...

Buenassss, ya estoy de vuelta.

Bien curioso el lugar que explicas. Tiene que ser muy agradable (una vez te acostumbras al "aroma", supongo) eso de embadurnarte y dejarte secar al sol (dicen que es muy curativo para la piel y la circulación). Yo lo hice en Menorca, hace un año y no me importaría repetir.

Y, aunque desconozco el precio de la entrada, si es que hay, seguro que te sale más barato que cualquier balneario. Y encima sintiéndote una romana de antaño.

Un abrazo.

Breuil dijo...

Uno, lo de la foto no va a ser posible... no quiero perder los pocos lectores que tengo.


Bornne, mi capitana :), espero que todo haya ido bien; y con respecto a estos baños romanos... son "de gratis". Sí, sí... BEsos, presiosa.

Francis Jiménez dijo...

PARA EL PERSONAL QUE DISFRUTA DEL ESTRES LABORAL DE LOS MESES DE JUNIO, JULIO Y EL GRAN AUGUSTO, EL MAGNANIME AUGUSTUS CON SUS GUSTUS TO ,NO ME QUEA NA, ES UN PEQUEÑO GRAN PLACER EVADIRME DE LA REALIDAD Y DISFRUTAR POR UN PEQUEÑO INSTANTE AUNQUE SE BREVE ES GRATIFICANTE, DE ESOS BAÑOS. GRACIAS

Landahlauts dijo...

Casares es un lujo. Un pueblo precioso, cuna de Blas Infante y con esas moscateles que quitan el sentío...

Y esos baños, no los conozco. Tengo que volver...

Saludos!!!!!